Por Arancha Gayoso.
No eres bueno contando historias, te aterra hablar en público y además no crees que haya nada interesante que contar sobre tu empresa. Al fin y al cabo, ésas son cosas sólo para los de Marketing… o para los de Ventas… y para eso ya hay una presentación corporativa en power point, así que la última vez que alguien a quien acababas de conocer, te preguntó a qué te dedicabas, entornaste los ojos, mascullaste algo a lo que siguió un breve silencio que basculaba entre la incomodidad y la indiferencia, y lo zanjaste con un cambio de conversación. No fue sexy. Nada sexy. Reconócelo.
Sin embargo, te vas a encontrar con esa conversación en muchas más ocasiones y podrías convertirlo en algo apasionante porque el arte de contar historias de la empresa o business storytelling no va de presentar cifras y datos, o frases llenas de tecnicismos, tiene que ver con compartir historias humanas, con “érase una vez…”, con expresar emociones y valores que nos conectan como seres humanos, que remueven nuestro pensamiento e incluso nos movilizan a la acción. Puedes describir un proceso (claro, estamos en un entorno empresarial) o una experiencia (con clientes, proveedores, socios, compañeros…) y convertirlo en un relato inspirador, interesante, didáctico… pero deberás hacerlo impactante y memorable, y para ello existen técnicas narrativas que todo profesional debe conocer.
La descripción aséptica de los hechos es más aburrida que la comida de hospital, pero una historia magnífica es desnudar el alma (corporativa) y hablarle (al mercado) de lo que hemos sido y de lo que somos capaces, quiénes son nuestros protagonistas, quiénes nuestros héroes, cuáles nuestras aspiraciones, reflejar cómo hemos superado dificultades, y qué aprendimos de nuestros fracasos, contar cómo nuestra propuesta de valor la hacemos real, y lo verdaderamente significativo que hay en nuestras vidas y en nuestras empresas. Porque sólo así, conectando con nuestro estado interior, podemos humanizar nuestra marca, darle una personalidad e iluminar nuestras historias, desafiando la manera tradicional de contar nuestra empresa.